Santo Domingo. – A tan solo un día de su inauguración, el nuevo paso a desnivel en la intersección de las avenidas Prolongación 27 de Febrero e Isabel Aguiar (Pintura) no ofreció la fluidez esperada para los conductores que ingresaban al Distrito Nacional durante las primeras horas de la mañana.
Mientras la salida hacia Santo Domingo Oeste y el Sur resultó ágil con un trayecto que apenas tomó un minuto, el acceso hacia el centro de la capital continuó presentando fuertes congestiones vehiculares.
Quienes transitaban desde la autopista 6 de Noviembre reportaron que, a las 7:00 de la mañana, el tráfico ya formaba una larga fila que se extendía desde el paso a desnivel hasta la Plaza de la Bandera.
La aplicación de navegación Waze indicaba retrasos de hasta 13 minutos, aunque en la práctica el recorrido superó los 15 minutos debido a la saturación vial y la confusión entre conductores.
Pese a los esfuerzos de los agentes de la Digesett por organizar el tránsito, el panorama fue de caos y desesperación: bocinas, cambios de carril y maniobras improvisadas dominaron la escena.
Parte de la Plaza de la Bandera continúa cercada con hojas de zinc, mientras obreros y maquinaria pesada trabajan desde temprano para completar los tramos pendientes de la obra.
“Los trabajos siguen en marcha, y esperamos ver pronto el resultado completo de la solución vial que se ha prometido”, expresaron varios conductores que, aunque reconocen los avances, aún consideran el trayecto como una zona crítica de movilidad.
El miércoles, el presidente Luis Abinader encabezó la entrega oficial del paso a desnivel, una obra ejecutada por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) y financiada con recursos provenientes de la renegociación del contrato con Aeropuertos Dominicanos Siglo XXI (Aerodom).
El proyecto tuvo un costo aproximado de 41 millones de dólares y fue completado en 18 meses.
Según informó el ministro Eduardo Estrella, para el segundo trimestre de 2026 está prevista la entrega de la continuidad del corredor, que incluirá el paso a desnivel de la avenida Gregorio Luperón, justo debajo de la Plaza de la Bandera.
Con esta obra, las autoridades buscan reducir significativamente el congestionamiento vial en una de las zonas más transitadas de la capital.
Sin embargo, los conductores coinciden en que aún falta coordinación y señalización adecuada para que la inversión cumpla su propósito de agilizar la entrada y salida del Distrito Nacional.