Monagas, Venezuela. – La comunidad de Toscana, en el municipio Piar, está de luto. Yohander, un niño de apenas 13 años, fue hallado sin vida la mañana de este martes en las conocidas “posas de oscilación”, también llamadas “La Cochinera”, tras haber desaparecido el día anterior.
Desde el momento en que se perdió su rastro, sus familiares y vecinos iniciaron una intensa búsqueda, compartiendo su fotografía con la esperanza de dar con su paradero.
Pero el desenlace fue devastador: el cuerpo del menor fue encontrado con signos evidentes de violencia y los pies amarrados con piedras, presuntamente para evitar que flotara en las aguas residuales donde fue arrojado.
Un crimen que ha generado conmoción, impotencia y una sola exigencia que retumba con fuerza: ¡Justicia!
“Los niños no se tocan, no se desaparecen, no se matan. Esto no puede quedar impune. Exigimos que las autoridades actúen con urgencia”, claman sus familiares.
Este hecho no solo enluta a una familia, sino que también despierta una herida profunda en la sociedad. Yohander merecía crecer, soñar, jugar… vivir.
Su ausencia deja un vacío imposible de llenar, y una pregunta que duele en el alma: ¿por qué?
Desde este espacio, enviamos nuestras más sinceras condolencias a sus seres queridos. Oramos para que Dios lo reciba en su infinita misericordia y que el pequeño Yohander descanse en paz.
Vuela alto, niño de luz. No merecías partir así.
